Lo bueno si es breve es dos veces bueno. Eso ha debido pensar Secret Machines ya que su nuevo disco Awake in the Brain Chamber lo componen tan solo ocho canciones que apenas duran más de 31 minutos. Salió a la venta el pasado 21 agosto de 2020 en una edición limitada de 500 vinilos; nosotros llevamos escuchándolo en bucle desde entonces.
Awake in the Brain Chamber es el cuarto álbum de estudio de la banda y el primero en más de una década. Está claro que en diez años pueden pasar muchas cosas en la vida de una persona, más en la de un grupo de música. Dejando a un lado proyectos paralelos o no tan paralelos, el fatídico acontecimiento que marcó la década de Secret Machines fue la trágica muerte de Benjamin Curtis en 2013, con tan solo 35 años, tras sufrir un cáncer de linfoma. Así que este disco es un renacer de las cenizas, un perfecto resumen de la oscuridad y el dolor de una década; de esos momentos en los que te encuentras desamparado, pero empiezas a ver la luz al final del túnel. Y lo cierto es que ellos lo han conseguido, con este nuevo disco han puesto luz dentro del caos.
Talosˈ Corpse fue el primer adelanto, un mes después publicaron Everythings Starts, que describe mejor la tónica general del disco y que además incluye partes de guitarra grabadas por Benjamin, ya que este disco se empezó a gestar realmente en 2012. Atrás han quedado las canciones de nueve minutos, pero la distorsión o el rock progresivo siguen estando presentes. También el carácter intimista y envolvente, rozando el Shoegaze de Ride en ocasiones. Dreaming is Alright suena fresca y urgente, adictiva. Igual que Everything´s Under, pero nuestra favorita del disco es A new Disaster.
Es de agradecer que Brandon Curtis y Josh Garza sigan haciendo música, y más que lo hayan hecho en un momento tan complicado como en este loco 2020. Ahora solo queda esperar que no pase década para que Secret Machines saque nuevas canciones.
Puntuación: 6.8/10